El Coronavirus (COVID-19) es una enfermedad infecciosa causada por un nuevo virus descubierto en 2019. Esta enfermedad se caracteriza por provocar síntomas respiratorios leves a graves, desde una tos leve hasta una neumonía grave. El virus se transmite principalmente a través de las gotículas respiratorias que se producen cuando una persona infectada tose, estornuda o expulsa saliva. Estas gotículas pueden caer en la boca o la nariz de una persona sana. El virus también se puede transmitir a través de contacto con las manos, objetos o superficies contaminadas con el virus.
Los síntomas más comunes del Coronavirus (COVID-19) son fiebre, cansancio y tos seca. En algunos casos, pueden aparecer dolores musculares, congestión nasal, dolor de garganta, diarrea y pérdida del olfato o del gusto. Si bien estos síntomas pueden ser leves en algunas personas, en otros pueden ser más graves, incluso provocar neumonía.
Para prevenir el contagio del Coronavirus (COVID-19) es importante que las personas laven sus manos con frecuencia con agua y jabón, eviten tocarse la cara con las manos sucias, mantengan la distancia social con otras personas, usen mascarillas cuando estén en espacios cerrados y eviten acudir a lugares con mucha gente. Si una persona presenta síntomas de Coronavirus (COVID-19), debe buscar atención médica de inmediato.